Normalmente al hablar de salud bucodental casi siempre pensamos en nuestros dientes y en las posibles enfermedades que pueden afectarlos. Hoy vamos a hablar de la gran olvidada en nuestra rutina de higiene diaria: la lengua.
La lengua es un músculo que interviene tanto en el proceso de digestión de los alimentos, -ayudando a masticarlos-; como a la hora de comunicarnos, ya que nos permite vocalizar los diferentes sonidos.
Debido a los surcos que forman su dorso, es muy fácil que la suciedad se acumule en ella, pudiendo producir mal aliento, caries y enfermedades periodontales. Te retamos a que saques tu lengua frente al espejo y observes si su dorso es de color rosado o en cambio es de color blanquecino. Si la respuesta es rosada, enhorabuena, ¡tu lengua está sana y limpia! Si, en cambio, su color declina más hacia el blanco, no está correctamente limpia y por lo tanto tienes más riesgo de sufrir enfermedades bucodentales.
En cualquier caso, te recomendamos que sigas los siguientes consejos para tener una lengua sana y lista:
- Usa un raspador lingual: se trata de una herramienta que te ayuda a limpiar tu lengua, y que gracias a su forma ergonómica facilita la limpieza completa con unos sencillos pasos.
- Limpia tu lengua al final de cada cepillado: utiliza tu cepillo de dientes para ello, empieza de atrás hacia delante y repite el movimiento hasta haber cubierto toda la superficie de la lengua.
- Utiliza un cepillo de doble cara: existen cepillos que por un lado tienen cerdas para limpiar tus dientes y por el otro tienen una cara rugosa que sirve para remover las bacterias de tu lengua.
- Sigue una alimentación sana: la lengua es un músculo, y como cualquier músculo también necesita proteínas, vitaminas y minerales para su fortalecimiento.
- Cuidado con las quemaduras: todos nos hemos quemado alguna vez mientras tomamos una bebida demasiado caliente o probamos ese caldito recién hecho… ten cuidado si no quieres sufrir esa desagradable sensación de cosquilleo tras habértela quemado.
- Besos sanos: los besos en la boca estimulan la creación de saliva y ayudan a mantener tu boca sana y feliz. Una correcta higiene de tu lengua es fundamental para disfrutar de besos agradables.
Y, para terminar, una curiosidad. ¿Sabías que el 30% de la población no consigue doblar la lengua en forma de “u”? ¡Descubre si tú también puedes!
Espera, espera… antes de irte. Participa en nuestro sorteo de Facebook para llevarte un cepillo de dientes eléctrico.