¿Alguna vez te has sentido incomodado/a por el mal sabor de boca? Aquí te explicamos algunos de los motivos que lo causan y te daremos posibles soluciones para acabar con él.

El mal sabor de boca puede tener varias causas, pero las más frecuentes son la alimentación, alguna enfermedad o la mala higiene bucal.

Alimentación

El hígado es un órgano esencial para depurar nuestro organismo. Conviene no abusar de sustancias tóxicas como el alcohol, ni de grasas como las de la comida chatarra. Un pequeño exceso de ambas junto a un desajuste en su depuración pueden causar un exceso de bilis. Esto conlleva una liberación de vapores que llegan hasta la boca y podrían producir un sabor amargo.

Para este tipo de problema recomendamos mejorar la alimentación y eliminar el consumo de bebidas alcohólicas.

Enfermedades gastrointestinales

Los problemas gastrointestinales también pueden ser una de las causas ya que nuestra boca forma parte de nuestro sistema digestivo. Gastritis, reflujo, indigestión… son evidencias de que algo no está yendo bien en nuestro interior, por lo que aconsejamos acudir a tu médico de cabecera para abordar el problema de raíz.

Las náuseas y los vómitos son otra de las causas, sobre todo en mujeres embarazadas en el primer trimestre. Para ello no hay más remedio que la paciencia y la espera.

Mala higiene bucal

En la cavidad bucal proliferan miles de bacterias que pueden afectar a la salud bucodental y cambiar nuestro gusto.

Las caries, por ejemplo, cuando llegan hasta la pulpa del diente, hacen que el tejido afectado se descomponga y produzca un mal sabor e incluso mal olor (halitosis)

Un exceso de placa bacteriana también puede ir acompañado del mal sabor de boca.

Para evitar ambas afecciones recomendamos mantener una correcta higiene bucal:

  • Aplicar un correcto cepillado tras cada comida
  • Emplear enjuague bucal adecuado
  • Utilizar hilo dental.
  • Visitar al dentista periódicamente para revisiones y limpiezas dentales.

Un dato curioso

¿Si estamos sanos, por qué tengo mal sabor de boca por las mañanas? La causa puede ser un mal vaciado del estómago durante la noche. Es decir, durante la digestión, no se contrae bien y se retienen un poco más los alimentos. Al estar tumbados se puede llegar a producir algo más de reflujo por la noche o que parte de la bilis pase al estómago y de ahí al esófago y a la boca.

El sarro consiste básicamente en una calcificación de la placa dental o bacteriana. Por ello, si no se elimina de forma regular, puede acumularse un exceso de sarro que se endurece y se va oscureciendo con el tiempo, pasando de un color blanco a uno amarillento y posteriormente marrón.

Además, puede causar halitosis y caries. Incluso (menos común), puede tener algún papel en el desarrollo de enfermedades cardíacas o cardiovasculares o en problemas digestivos.

Hoy en nuestro post veremos qué es exactamente el sarro dental y cómo evitarlo. ¡Sigue leyendo!

¿Qué es?

El sarro es un cúmulo de placa bacteriana que se ha endurecido sobre los dientes y/o en las encías. La placa bacteriana es una capa muy fina y transparente sobre la cual se depositan las bacterias bucales. Aparece en nuestra boca cuando todavía no hemos empezado a hablar y su formación es inevitable cada vez que ingerimos algún alimento, ya sea sólido o líquido. El sarro es una sustancia más dura y más difícil de eliminar que la placa bacteriana.

Una de las problemáticas que presenta es que, debido al exceso de placa, las bacterias pueden adherirse con mayor facilidad y reproducirse, llegando a crear caries o produciendo enfermedades en las encías. Además, las manchas en el esmalte se absorben con mayor facilidad debido a la superficie porosa, lo que afectará negativamente al blanco de nuestros dientes, por lo que habrá que moderar el consumo de bebidas oscuras y el tabaco.

 

¿Cómo identificarlo?

Presenta un color amarillento o marrón si la acumulación es excesiva. Llegado a este punto sería conveniente visitar a un especialista de manera urgente para una profilaxis (tratamiento que consiste en la eliminación de las bacterias acumuladas). Destacamos que, si bien puede resultar algo molesto por su posterior sensibilidad dental, en conjunto es una práctica indolora para el paciente.

No solo la salud se ve perjudicada por el sarro, sino también la imagen de uno mismo. Estéticamente nuestra sonrisa dará la impresión de una higiene bucodental descuidada y una sonrisa amarillenta.

 

Prevención

Lo más importante para evitar el sarro es tener una buena rutina de cepillado después de cada comida y mínimo 2 veces al día, sobre todo, antes de ir a dormir. ¿Cómo conseguirla? Se recomienda masajear la dentadura y las encías con un cepillo de cedras suaves durante unos 2 minutos, insistiendo alrededor de los molares.

Además, el uso del hilo dental proporcionará una limpieza más profunda, llegando a sitios donde la entrada del cepillo se ve limitada.

No se debe descuidar tampoco el raspado lingual, que evitará la acumulación de bacterias.

Para finalizar la rutina, hay unas diversas variedades de colutorios especializados que se pueden incluir al final de cada cepillado.

 

No obstante, no olvides visitar regularmente a tu dentista y realizar limpiezas bucales rutinarias.

Cada vez vemos más niños muy pequeños con problemas de caries. Por eso,  los odontológos recomiendan que la primera visita de un niño sea durante su primer año y, posteriormente, una revisión anual.

¿Qué ocurre en la primera visita de los niños al dentista?

En la primera visita al dentista, el profesional revisará si hay caries del biberón o si hay algún tipo de alteración en el crecimiento de los dientes y se iniciará un historial sobre antecedentes médicos y dentales del niño.

Además, el dentista recomendará a los padres las pautas para una correcta higiene bucodental.

Miedo al dentista

Es muy común que los niños sientan miedo en su primera visita al dentista. Lo mejor es que el odontopediatra se esfuerce en favorecer el acercamiento al niño.

También es tarea de los padres hablar delante del niño de forma positiva sobre el dentista. Acudir con los niños en edades muy tempranas para que se familiaricen con la clínica, intentar explicarle de la mejor forma la importancia de una correcta higiene dental y evitar realizar comentarios negativos.

Examina los dientes del bebé

Debes de tener el hábito de revisar regularmente los dientes del bebé. Los dientes saludables tienen un color blanco uniforme, así que si ves manchas o puntos en los dientes, no dudes en llamar a tu dentista de confianza para una revisión.

¿Cómo prevenir caries en los dientes de leche?

Aunque a tu bebé no le hayan crecido los dientes aún, debes de realizar una limpieza en sus encías. Para esta limpieza deberás de usar una gasa humedecida y cuando le salgan los primeros dientes, tendrás que usar un cepillo. IMPORTANTE, hasta los dos años de edad NO se puede usar pasta de dientes. A partir de los dos años podrás emplearla siempre y cuando esté especialmente indicada para niños.

 

En Clínica Dental Bona ofrecemos el servicio de odontopediatría, consulta más información aquí y pide cita para la revisión de tu hijo.

 

¡Os esperamos!

La sonrisa es nuestra carta de presentación, y por ello es tan importante cuidar de ellas.

Ya hemos hablado de los alimentos que son positivos para nuestra salud bucal y también hemos hablado de la importancia de una buena higiene dental.

Pero hoy en nuestro blog vamos a hablar de malos hábitos que estropean tus dientes, si quieres que tu boca se vea sana y cuidada ¡evita hacerlos!

10 malos hábitos que estropean nuestros dientes.

• Fumar.

De todos los malos hábitos este es el que debes cambiar cuanto antes. Lo habrás leído miles de veces, pero debemos mencionarlo. La nicotina oscurece el esmalte y mancha los dientes. Puede provocar además enfermedades en las encías y puede causar cáncer de boca.

 

• Usar los dientes como herramienta.

Cortar etiquetas, destapar botellas… todo esto puede hacer que tus dientes se fracturaren y desgasten.

 

• Rechinar los dientes o apretarlos (bruxismo).

Desgasta la superficie de los dientes y hasta puede aflojarlos. También afecta la articulación de la mandíbula.

 

Si crees que sufres de bruxismo, ponte en contacto con nosotros ya que es posible que necesites para dormir un protector especial (férula).

 

• Beber café.

Su color y su acidez pueden manchar los dientes o ponerlos amarillos. Cepilla bien los dientes a menudo para evitar que se manche y se deteriore el esmalte.

 

• Comer golosinas.

Las golosinas se pegan a los dientes, y el azúcar (y los ácidos que produce) permanecen  en contacto con tus dientes por horas, causando daños en el esmalte.

 

• Beber vino y refrescos.

Tanto el vino tinto como el vino blanco contienen ácidos que deterioran el esmalte de los dientes.

 

• Masticar hielo.

El hielo está muy duro y masticarlo puede fracturar los dientes.

 

• Morder los lápices.

Una manía bastante común, ¡pues deja de hacerlo ahora mismo! Es igual que masticar hielo: puede fracturarte los dientes.

 

• Cepillarte los dientes con mucha fuerza.

Puede producir retracción de las encías y exceso de sensibilidad en ellas.

 

• Cepillarte los dientes con movimientos horizontales.

Desgasta el esmalte. Lo correcto es cepillarlos con movimientos circulares.

 

¿Cuántos de estos malos hábitos practicas tú? Aunque no puedas eliminarlos todos de una vez, empieza poco a poco, como eliminando el cigarrillo.

Además, debes visitar al dentista regularmente para revisiones y limpiezas.

 

¡Pide cita con nosotros!

 

Antes de nada, comentarte que sólo los dientes de leche son blancos, una vez que salen lo definitivos, aparecen ya con un leve tono amarillento que se oscurece con el paso del tiempo, debido a diferentes factores, hoy en nuestro blog veremos algunos de ellos.

Alimentos y bebidas

Seguro que alguna vez lo has oído y es que hay algunas bebidas y alimentos que provocan que nuestros dientes se vean amarillos.

Bebidas como el café, tés y refrescos o frutas como los arándanos hacen que aparezcan manchas en nuestros dientes dada su pigmentación.

Higiene dental

Esto es algo obvio, pero debemos recordar e insistir en la importancia de una correcta higiene bucal. No cepillar los dientes diariamente puede originar manchas en tu dentadura y unos dientes amarillos.

Pero ya no solo debes de preocuparte por la estética de tus dientes, no cepillarte los dientes diariamente puede terminar en graves problemas bucodentales.

Genética

La genética puede marcar las características del esmalte dental.

Si tus padres tienen una capa muy fina de esmalte, puede que tu también lo heredes. Cuanto más fina sea esa capa, más amarillos serán los dientes.

Edad

Igual que para nuestra piel, el paso de los años es inevitable. La edad provoca poco a poco un desgaste en nuestros dientes y una pérdida del blanco original.

Medicamentos

Hay algunos medicamentos que provocan la decoloración en nuestros dientes.

Por ejemplo, la minociclina, que normalmente es empleada para combatir el acné, e incluso medicamentos más comunes como los antihistamínicos, antidepresivos o fármacos para la presión arterial pueden producir que los dientes tengan un tono más amarillento.

Flúor

El flúor es muy beneficioso para nuestros dientes, pero en pequeñas dosis. Si usamos gran cantidad de flúor y lo acumulamos en exceso es dañino para nuestro esmalte.

 

Seguro que ahora te estás preguntando si hay algún tipo de solución para evitar que nuestros dientes tomen ese color amarillos, claro que sí.

Gracias a los avances en odontología, hoy en día hay soluciones avanzadas que pueden hacer que tus dientes vuelvan a lucir de color blanco. En Clínica Dental Bona ofrecemos un servicio de blanqueamiento dental.

Con este tratamiento tomaremos unas medidas para realizar una réplica de la boca del paciente, a partir de la cual se confeccionarán unos moldes de plástico (férulas) que se adaptarán a los dientes y donde se colocará el gel blanqueador.

El tratamiento se realizará durante 14 días, En la primera visita, realizaremos una exploración clínica de cada caso, y tomaremos una serie de fotografías para valorar la estética de los dientes y evaluar los resultados del blanqueamiento dental.

Llámanos para cualquier consulta y pide tu cita.

¡Te esperamos!

 

Cada vez es más común que personas adultas opten por llevar ortodoncia. El principal motivo es por la parte estética, pero la ortodoncia también soluciona problemas de salud bucodental.

Nunca se es demasiado mayor para llevar ortodoncia, por ello hoy hablaremos de las principales ventajas de la ortodoncia en adultos.

Principales ventajas de la ortodoncia en adultos

Ayuda con el bruxismo

El bruxismo consiste en el hábito de apretar o rechinar los dientes. Es un hábito que afecta a un gran porcentaje de la población infantil y adulta, debido fundamentalmente al aumento del estrés en nuestros hábitos de vida.

También existe una relación importante entre el bruxismo y las maloclusiones, que son mordidas incorrectas por malposición de los dientes. Todo ello se traduce en un desgaste generalizado de los dientes y una sobrecarga importante de los músculos de la masticación, que puede dar lugar a dolores musculares, dolores de cabeza tensionales, dolores en la articulación y sensibilidad generalizada en los dientes. Por ello es de suma importancia el diagnóstico de esta patología y llevar a cabo un adecuado tratamiento, que consiste en el uso de diferentes férulas en función del caso.

La ortodoncia ayuda a corregir esas maloclusiones, mejorando la posición de los dientes y la mordida.

 

Mejora problemas de salud gastrointestinal y dolores de espalda

Una maloclusión provoca que la comida no sea masticada de forma correcta, por lo que hace la digestión mucho más difícil y provoque dolor de estómago.

Además, muchos problemas de cervicales vienen provocados por una mal colocación de la mandíbula, lo que genera tensión muscular y dolores de cabeza y cervicales.

 

Reduce la aparición de caries y enfermedades de encías.

La ortodoncia mejorará el estado general de la boca, por lo que también mejorara la higiene dental. Será mucho más fácil limpiar nuestros dientes y reducir la placa dental, reduciendo así la posible aparición de caries o de cualquier enfermedad periodontal.

 

Mejora la forma de hablar y pronunciar

Muchos pacientes presentan problemas al pronunciar algunas palabras, esto puede ser provocado por problemas graves en la mordida.

La ortodoncia, al corregir la mordida, también mejorará las dificultades de pronunciación.

 

Aumenta la felicidad y autoestima

Si sufres de maloclusión o apiñamiento de tus dientes, seguramente habrás sentido vergüenza o te has sentido inseguro a la hora de sonreír.

La ortodoncia te ayuda a lucir una sonrisa mucho más bonita y alineada para que dejes de tener complejos a la hora de sonreír.

 

Como has podido comprobar, estos son algunos de los beneficios que nos aporta el uso de ortodoncia, más allá de los estéticos.

 

En Clínica Dental Bona valoraremos tu caso y lo estudiaremos para ofrecerte la mejor opción de ortodoncia. Ponte en contacto con nosotros llamando al: 965 20 00 20

 

No podemos negar que el embarazo es una de las épocas más especiales para la mujer. Al ser una etapa muy importante, los cuidado y preocupaciones suelen elevarse en esos meses.

Los aaspectos que más cuidan las embarazas son la alimentación, el deporte y los medicamentos. Pero hay otra cuestión muy importante que suele pasar desapercicbida: la higiene dental.

Hoy en nuestro hablaremos sobre cómo afectan las enfermedades de las encías durante el embrazo.

La falta de una buena higiene dental durante el embrazo puede provocar la aparición de enfermedades como la gingivitis, la periodontitis o la piorrea.

 

¿Qué es la gingivitis?

La gingivitis es la inflamación de la encía. Se produce por el depósito de placa bacteriana, existiendo una relación directa entre la cantidad de placa y la severidad de la gingivitis.

Cuanto más tiempo pase el sarro en nuestros dientes, mayores son las probabilidades de que se pueda desencadenar una enfermedad periodontal.

Por ejemplo, la piorrea llega a destruir los tejidos que sirven de soporte para los dientes (encías, ligamentos periodontales, hueso alveolar…). La consecuencia inevitable es la caída del diente.

 

¿Gingivitis gestacional?

Este tipo de enfermedad se produce durante el embarazo, pero no es provocado por el embarazo.

Lo que realmente ocurre es que las hormonas del embarazo desencadenan que la gingivitis empeore.

Según datos de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA), la denominada gingivitis del embarazo tiene una prevalencia de entre el 36 y el 100% de las embarazadas que habían padecido esta enfermedad con anterioridad.

Sin embargo, esta patología aparece tan en el 0,03% de mujeres libres de placa al inicio del embarazo y que mantienen buenos hábitos de higiene bucal durante el mismo.

 

¿Qué provoca la gingivitis en el embarazo?

Hormonas:

El aumento de las hormonas provoca una mayor inflamación y sensibilidad en los dientes y encías.

Aumento del flujo sanguíneo:

En el embarazo, el flujo sanguíneo aumenta más del 30% para asegurarse de que el bebé está recibiendo los nutrientes necesarios para su correcto desarrollo.

Al aumentar el flujo sanguíneo las encías se inflaman, provocando dolor y sangrado.

Náuseas y vómitos:

Una de los efectos más incómodos que sufren las embarazadas son los vómitos.

Estos también son perjudiciales para nuestra salud dental, ya que el ácido estomacal que se produce daña tanto el tejido gingival (encías) como el esmalte de los dientes.

 

¿Cómo saber si sufro de gingivitis?

  • Encías sensibles que sangran con el cepillado o de manera espontánea
  • Encías muy hinchadas
  • Encías enrojecidas y de aspecto brillante
  • Encías brillantes
  • Sabor desagradable en la boca

 

Si reconoces alguno de estos síntomas, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para una correcta limpieza dental. Además, te ofreceremos consejos para una mejor higiene en casa.

 

Normalmente al hablar de salud bucodental casi siempre pensamos en nuestros dientes y en las posibles enfermedades que pueden afectarlos. Hoy vamos a hablar de la gran olvidada en nuestra rutina de higiene diaria: la lengua.

La lengua es un músculo que interviene tanto en el proceso de digestión de los alimentos, -ayudando a masticarlos-; como a la hora de comunicarnos, ya que nos permite vocalizar los diferentes sonidos.

Debido a los surcos que forman su dorso, es muy fácil que la suciedad se acumule en ella, pudiendo producir mal aliento, caries y enfermedades periodontales. Te retamos a que saques tu lengua frente al espejo y observes si su dorso es de color rosado o en cambio es de color blanquecino. Si la respuesta es rosada, enhorabuena, ¡tu lengua está sana y limpia! Si, en cambio, su color declina más hacia el blanco, no está correctamente limpia y por lo tanto tienes más riesgo de sufrir enfermedades bucodentales.

En cualquier caso, te recomendamos que sigas los siguientes consejos para tener una lengua sana y lista:

  • Usa un raspador lingual: se trata de una herramienta que te ayuda a limpiar tu lengua, y que gracias a su forma ergonómica facilita la limpieza completa con unos sencillos pasos.
  •  Limpia tu lengua al final de cada cepillado: utiliza tu cepillo de dientes para ello, empieza de atrás hacia delante y repite el movimiento hasta haber cubierto toda la superficie de la lengua.
  • Utiliza un cepillo de doble cara: existen cepillos que por un lado tienen cerdas para limpiar tus dientes y por el otro tienen una cara rugosa que sirve para remover las bacterias de tu lengua.
  • Sigue una alimentación sana: la lengua es un músculo, y como cualquier músculo también necesita proteínas, vitaminas y minerales para su fortalecimiento.
  • Cuidado con las quemaduras: todos nos hemos quemado alguna vez mientras tomamos una bebida demasiado caliente o probamos ese caldito recién hecho… ten cuidado si no quieres sufrir esa desagradable sensación de cosquilleo tras habértela quemado.
  • Besos sanos: los besos en la boca estimulan la creación de saliva y ayudan a mantener tu boca sana y feliz. Una correcta higiene de tu lengua es fundamental para disfrutar de besos agradables.

Y, para terminar, una curiosidad. ¿Sabías que el 30% de la población no consigue doblar la lengua en forma de “u”? ¡Descubre si tú también puedes!

Espera, espera… antes de irte. Participa en nuestro sorteo de Facebook para llevarte un cepillo de dientes eléctrico.

 

En Clínica Bona siempre decimos que el hábito de fumar afecta negativamente a nuestra salud dental. Pero hoy vamos a ver qué efectos negativos en concreto puede tener en nuestra boca.

Los cigarrillos están compuestos por una serie de más de 4.000 sustancias como el alquitrán, la nicotina, el arsénico, el monóxido de carbono, el amoniaco e incluso el azúcar. Algunos de estos elementos se utilizan en productos de limpieza, y otros están totalmente prohibidos.

Así, el consumo de estos productos en forma de cigarro, puede producir las siguientes enfermedades:

Enfermedades orales

  • Periodontitis: el tabaco puede provocar inflamación o infección de las encías.
  • Caries: al fumar, reducimos nuestra secreción de saliva y esto facilita la acumulación de placa bacteriana en nuestros dientes, pudiendo provocar así la formación de caries.
  • Halitosis: este es un problema el cual muchas veces no somos conscientes de que lo sufrimos. El humo provoca un aliento característico muy desagradable que persiste tras varias horas después de dejar de fumar.
  • Pérdida del sentido del gusto y del olfato: los cigarrillos hacen que se debiliten nuestras papilas gustativas, disminuyendo nuestra capacidad para percibir los olores y los sabores.

Consecuencias estéticas

  • Coloración de los dientes: el consumo de tabaco hace que, a la larga, los dientes vayan adquiriendo un tono amarillento o amarronado, lejos del tono blanco que embellece el diente.
  • Dificultades con implantes dentales: los fumadores tienen un mayor riesgo de padecer complicaciones con un implante dental, ya que los componentes del tabaco afectan a la osteointegración, el proceso de unión entre el implante y el hueso.
  • Pérdida de dientes: en casos graves, la periodontitis puede llegar a provocar el aumento de la movilidad de los dientes y por ende la caída de los dientes.

Cáncer oral

Desgraciadamente, el tabaco causa el 22% de muertes por cáncer, ya que puede provocar además de cáncer de lengua o labios, tumores en el sistema respiratorio o en órganos como el intestino o el riñón.

Sin duda, nuestra salud bucodental se verá favorecida poco a poco si abandonamos este hábito. Un consejo para dejar de fumar: elige un día, sonríe y pide ayuda a un profesional para que te ayude.

Cuando conocemos a una persona ¿qué es lo primero que miramos? Exactom, su rostro y en especial en su sonrisa, por ello, es de vital importancia tener unos dientes y una boca bonita y cuidada gracias a la higiene bucodental. La sonrisa es nuestra mejor carta de presentación y la placa dental su principal enemigo.

La placa dental es una capa de color blanquecino-amarillento producido por la acumulación de restos alimenticios, bacterias y gérmenes. Crece poco a poco y a medida que lo hace se incrusta en los dientes.

La formación de la placa comienza a partir de restos alimenticios depositados en la superficie de las piezas dentales, las cuales favorecen el crecimiento y la reproducción de bacterias. Estas bacterias producen a la degeneración y la destrucción del esmalte.

Cuando la infección no se trata, el proceso avanza hacia el interior de la pieza dentaria, destruyendo la dentina y la pulpa. Los gérmenes y las bacterias lesionan el nervio sensitivo de la pieza, produciendo un intenso dolor.

Cuando el esmalte se altera y la infección progresa hacia el interior, aparecen síntomas como el dolor y las molestias al tomar alimentos muy azucarados, fríos o calientes, signo de que el nervio se encuentra poco protegido.

La causa de este problema es debido a la falta de una buena higiene bucodental. Cuando no se tienen una buena rutina de cepillado y uso de hilo dental, el aumento de la placa dental genera un desagradable olor y puede conducir a enfermedades más serias como, por ejemplo, la aparición de gingivitis y la enfermedad periodontal (perdida del hueso dental).

Además, es una de las principales causas de las caries, cuya presencia está condicionada por la existencia de factores hereditarios metabólicos y constitucionales.

Las recomendaciones para evitar la placa dental consisten en tener hábitos saludables y buena higiene bucodental. También es aconsejable seguir las siguientes sugerencias:

  • Evitar fumar y el exceso de café
  • Evitar alimentos azucarados
  • El cepillado regular después de cada comida
  • Uso de hilo dental para la limpieza de los espacios interdentales
  • Enjuagues periódicos con colutorios fluorados
  • Visitas periódicas al dentista cada 6 meses

Desde la Clínica Dental Bona queremos recalcar la importancia de asistir a los especialistas para evitar futuras caries o circunstancias más serias. En muchas ocasiones el paciente no es consciente de que tiene placa dental hasta que descubre síntomas más avanzado como el dolor y las molestias al tomar ciertos alimentos.

 

Los avances en el campo de la ortodoncia han proporcionado en los últimos tiempos increíbles resultados. Antiguamente, un aparato dental era algo muy molesto y aparatoso, pero a día de hoy existen diferentes tipos de ortodoncia disponibles para adaptarse a las necesidades de cada paciente.

Hoy en el blog de Clínica Dental Bona veremos los diferentes tipos de ortodoncia.


Aunque existan diferentes tipos, todos tienen un único objetivo: corregir la posición de los dientes. A través de la ortodoncia conseguimos aplicar fuerza, de una forma medida y controlada, para lograr el desplazamiento permanente de los dientes hacia la posición deseada, ya sea por estética o por funcionalidad.

Ortodoncia fija

Es la más conocida y la más usada actualmente. En este tipo de ortodoncia se emplean alambres y brackets. Los brackets se adhieren a los dientes y se fijan con el alambre.

Los brackets producen una ligera fuerza para corregir cualquier maloclusión desde cualquier edad.

Dentro de la ortodoncia fija, encontramos dos tipos:

Brackets: Se colocan en la parte externa de los dientes y son totalmente visibles. Es el tratamiento con menor coste y son más utilizados en niños y adolescentes. De todas formas, existen brackets estéticos hechos con materiales como cerámica o porcelana que son mucho menos visibles que los de acero.

Lingual: Este tipo de ortodoncia es parecida a los brackets, pero con una evolución, y es que los brackets y el arco se adhieren a la parte interna del diente, consiguiendo un acabado más estético ya que no se ve a simple vista.

Ortodoncia invisible

Lejos quedan los aparatosos sistemas de corrección, ya que hoy en día existen novedosos sistemas de ortodoncia invisibles que te permiten corregir tus dientes de una forma discreta y eficaz.

Se trata de una especie de férula transparente removible que va corrigiendo la posición de los dientes poco a poco. Es un tratamiento en el que se construye la férula de manera personalizada y se va cambiando cada cierto tiempo hasta alcanzar el resultado deseado.

Es necesario llevarlo puesto todo el día, excepto para comer y lavarnos los dientes de la forma habitual.

Debes prestar cuidado a la limpieza diaria del aparato removible, puedes usar cepillos especiales o sumergirlo en agua junto con comprimidos limpiadores.

Consejos para cualquier tipo de ortodoncia

Si normalmente se debe mantener una correcta higiene dental, es especialmente importante mientras se lleva un tratamiento de ortodoncia. Hoy en día existen cepillos especiales para brackets, irrigadores bucales que ayudan a limpiar los restos de comida con agua a presión o cepillos interproximales e hilo dental de diferentes tamaños según las necesidades.

Una vez finalizado el tratamiento de ortodoncia, los dientes tiendan a volver a su posición inicial y es importante usar un retenedor el tiempo que nuestro dentista nos paute, porque mantiene los dientes estables en su nueva posición.

 

Sin duda, un tratamiento de ortodoncia hará que tu dentadura luzca más sana y más bonita, así que sonríe y presume de sonrisa.

 

Consulta todos nuestros tratamientos de ortodoncia aquí.

El miedo a acudir al dentista es algo más normal de lo que parece. De hecho, hay muchísimas personas que llevan años sin pisar la consulta por la ansiedad que les genera la idea de ver al dentista y sentir dolor.

Pero esto no se puede permitir, puesto que no acudir al dentista tiene consecuencias negativas como por ejemplo, la pérdida de piezas dentales o infecciones graves.

Hoy, en el blog de Clínica Bona, vamos a daros unos consejos para saber cómo superar el miedo al dentista.

Normalmente, el miedo al dentista surge por una experiencia pasada que ha sido negativa, como cuando de pequeños nos quitaron una carie o los pinchazos de la anestesia.

Muchos dentistas son conscientes del pánico que puede sentir una persona en consulta e intentan hacer lo posible para que el paciente se relaje y se sienta lo más cómodo posible, pero hoy vamos a daros una serie de consejos para que puedas llevarlos a la práctica y traer algo de trabajo hecho de casa.

Cómo superar el miedo al dentista

Reflexiona

¿Por qué te da miedo ir al dentista? Es importante que sepas identificar la razón por la que te da miedo acudir para que puedas afrontarla.

Falta de información

Acudir a la clínica para informarte y hablar personalmente con la persona que te va a tratar te aportará tranquilidad. Puedes contarle tu miedo y consultar todas las dudas que te surjan. Seguro que te ayuda a tranquilizarte y a concienciarte de que no te ocurrirá nada malo.

Escoge bien la clínica a la que vas a ir

Pide a tus amigos o familiares que te recomienden una clínica de confianza. Ellos te aconsejarán y te contarán sus experiencias para que no vayas desconfiado.

No tengas vergüenza

En tu primera consulta, no tengas temor de contar tu problema. El miedo al dentista es una ansiedad más común de lo que crees y, además, muchos odontólogos están especializados con el trato de los pacientes con miedo.

Busca un entretenimiento mientras esperas

Mientras esperas en la sala a tu primera consulta, intenta ir acompañado para poder hablar con alguien e impedir pensamientos negativos de lo que podría pasar en la consulta. Si no puede acompañarte nadie, puedes llevarte un libro o escuchar música para entretenerte.

Pide cita por la mañana

Si de verdad la idea de ir al dentista te impide concentrarte y lo pasas muy mal, te aconsejamos que pidas cita a primera hora de la mañana. Así te lo quitas de encima lo antes posible y tendrás menos tiempo para pensar en tu miedo.

Una señal de aviso con tu dentista

Mucha gente acuerda con su dentista hacer un tipo de señal para avisarle de que lo estás pasando mal y necesitas descansar un momento durante la intervención. Esto te tranquilizará, ya que sientes que tienes el control de la situación.

 

Hoy en día, los tratamientos en el dentista son totalmente sin dolor gracias a la sedación y a la anestesia. No hay razón por lo que debas sentir miedo, lleva a cabo estos consejos para superar tu miedo al dentista. En Clínica Dental Bona te ofreceremos el mejor servicio al paciente para que siempre te sientas cómodo y seguro.

No te lo pienses más y pide cita llamando al 965 20 00 20

¡Queremos ser tu dentista de confianza!

La salud dental puede afectar a tu día a día al igual que cualquier otro problema de salud. Es importante que cuides tu boca y tus dientes de la misma manera que mimas tu piel, tu pelo o tu mente.

Ya hemos hablado de los alimentos que pueden ser beneficiosos para nuestra salud bucodental, así que hoy os traemos una lista de alimentos que pueden ser perjudiciales para nuestra salud dental. Es aconsejable que hagas de ellos un consumo moderado para que no puedan causar ningún problema indeseado en tus dientes o en tus encías.

¡Empezamos!

Bebidas carbonatadas

Este tipo de bebidas contienen ácidos, que disminuyen el ph y contribuyen con ello a incrementar el nivel de acidez de la boca y el riesgo de sufrir caries.

Azúcar

La OMS recomienda reducir el consumo de azúcar, ya que es una de las principales causas de dolencias en nuestra salud bucodental, pudiendo provocar caries. Hay muchos más alimentos procesados de los que pensamos que llevan grandes cantidades de azúcar y que pueden resultar perjudiciales.

Café y té

Pese a que el té verde y negro tienen un alto poder antioxidante y nos ayudan a controlar el desarrollo de bacterias que provocan caries y enfermedades de encías, un consumo excesivo puede llegar a oscurecer tus dientes.

El café posee una alta concentración de cromógenos y por ello también puede provocar manchas en nuestros dientes.

Alcohol y tabaco

Ambos pueden causar infecciones en nuestra boca ya que desequilibran los niveles de hongos y bacterias que habitan en nuestras mucosas. El tabaco también puede producir inflamación y sangrado de nuestras encías.

Golosinas y chocolatinas

La mayoría de las chucherías, los caramelos y las chocolatinas que tanto gustan a niños y a adultos contienen un alto porcentaje de azúcar, que como ya hemos contado, es perjudicial para nuestra salud dental. Un consejo: si eres fan del chocolate y quieres disfrutar del auténtico sabor del cacao te recomendamos que, como alternativa saludable, lo compres con más del 70% de chocolate.

Productos pegajosos

La textura y consistencia pegajosa de algunos alimentos se adhiere a la dentadura y los convierte en enemigos para nuestra boca. Algunos ejemplos son la fruta deshidratada, los caramelos masticables, algunos snacks… Si no puedes evitarlo, intenta enjuagarte la boca con agua después de ingerirlos para eliminar sus restos.

Hielo

¿Has mordido hielo alguna vez y has notado en tus dientes una sensación dolorosa? Masticar hielo provoca hipersensibilidad dental al igual que ingerir bebidas muy frías.

¿Sufres molestias en tus dientes al beber algo frío? ¿Te cepillas los dientes o usas hilo dental y sientes dolor? Si tu respuesta ha sido que sí, sufres un problema de sensibilidad dental. Hoy en nuestro blog os daremos una serie de consejos para combatir la sensibilidad dental. Si estás sufriendo este problema, ¡continúa leyendo!

¿Qué es la sensibilidad dental?

La sensibilidad dental es un dolor transitorio que es provocado por el cambio de temperatura, beber refrescos ácidos o incluso por cepillarse los dientes demasiado fuertes.

10 consejos para combatir la sensibilidad dental

1.       Para cepillar tus dientes, lo mejor es que uses un cepillo con los extremos redondeados y suave.

2.       No abuses de los alimentos y bebidas ácidas, ya que estos desgastan el esmalte del diente. Con bebidas y alimentos ácidos nos referimos a zumos, vino, vinagre…

3.       Aumenta el consumo de alimentos que son beneficiosos para tus dientes, como las espinacas o los plátanos, que tienen oxalato y mejoran la sensibilidad dental.

4.       Ten cuidado con el cambio brusco de temperatura en las comidas.

5.       Evita la manía de morder lápices o bolis, introducir palillos o cortar cosas con los dientes. Todos estos actos hacen que los dientes se desgasten.

6.       No cepilles tus dientes con demasiada fuerza, eso no hará que tus dientes se limpien mejor, lo único que provocará es que te duelan más las encías.

7.       No uses pasta de dientes abrasiva y no olvides tu hilo dental.

8.       En el mercado puedes encontrar enjuagues y pastas especiales para este tipo de tratamiento, pregúntale a tu dentista.

9.       No siempre, pero puede pasar, la sensibilidad dental es provocada por el bruximo. Si es el caso, lo mejor es utilizar una férula mientras duermes para proteger tus dientes.

10.   Si ves que el dolor no cesa, debes de acudir de inmediato a un especialista para descartar un problema más grave.

¡Prueba estos sencillos consejos!

Llámanos para pedir tu cita: 965 20 00 20 – 634 76 28 27 o envíanos un email: info@clinicadentalbona.com

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